Hotel Restaurant De Bouilhac, Montignac-Lascaux (FR) - Ofertas y Reseñas

Es un hotel precioso con una ubicación sensacional y estupenda cercana al río...

Este lugar es maravilloso, con un edificio con encanto histórico, un personal encantador y servicios excepcionales, además de un restaurante increíble con comida deliciosa.

La ubicación era genial, cerca del río y del centro. Nos encantaron las habitaciones, especialmente la ducha. El personal fue amable 😊.

Una ubicación estupenda por el precio que se paga, no muy lejos del centro de la ciudad, también de un excelente restaurante. Las camas eran super cómodas, y había un televisor de pantalla plana, una caja fuerte y un refrigerador minibar en la habitación. Vistas a la ciudad, y servicios excepcionales. Solo pasamos allí 2 noches, pero sentimos que no dudaríamos en volver.

El hotel está a pocos pasos del centro histórico y de un excelente restaurante. La piscina es preciosa. El personal es extremadamente agradable. La habitación doble que reservé era sorprendentemente nueva y contaba con baño y ducha.

Las camas son super cómodas. Buena selección de vinos.- Precioso hotel, bien situado.- Montignac es una villa preciosa y con precios razonables.

El personal es superamable y atento, te hacen sentir como en casa. Las habitaciones son súper nuevas y bonitas, además, ¡tienen baño propio! 🌟

Durante mi reciente viaje por Montignac-Lascaux, tuve la oportunidad de hospedarme en el Hôtel de Bouilhac, un hotel de tránsito en la hermosa región de Perigord Noir. La ubicación del hotel es ideal, ya que se encuentra cerca del aeropuerto, a tan solo 60 km de distancia. Este factor resultó muy conveniente para mí, ya que buscaba un lugar para pasar la noche antes de continuar mi viaje. Además, el hotel cuenta con unas comodidades excelentes y su personal es muy amable y atento. La limpieza de las habitaciones fue impecable y pude descansar tranquilamente durante mi estancia.

Si tuviera que mencionar un aspecto negativo del hotel, sería la falta de una silla en la habitación. Aunque esto puede parecer un detalle menor, a veces uno desea sentarse cómodamente para leer o trabajar un poco en la habitación y la ausencia de una silla fue algo que me llamó la atención.

Nos encantó la habitación del Hotel de Bouilhac! Decorada de forma única, con una cama súper cómoda y una selección de almohadas para elegir. Además, teníamos aire acondicionado y batas de baño, ¡nos sentimos como en un lujoso hotel!

Aunque la habitación era genial, no nos gustó tanto que no tuviera una zona de estar. Pero eso es solo nuestra opinión, ¡a otros huéspedes les puede encantar!

Castillo restaurado con exquisito gusto. Elegancia, delicadeza y calidez.Habitación amplia y fantástica cama.Precioso baño de diseño.

Nada de nada.

Una experiencia espectacular que superó nuestras expectativas. El Bouihac Hotel es un lugar maravilloso, con una bonita casa palaciega restaurada, espacios interiores amplios y un restaurante excelente. El diseño, el servicio y la carta del restaurante son excelentes. Nos quedamos encantados con nuestra estancia y recomendaríamos este hotel sin dudarlo.

Era realmente un hotel maravilloso y estupendo de 4 estrellas en todos los sentidos. Personal increíble y ubicación sensacional, perfecto para mí. - El lugar estaba a tan cerca del centro de Montignac-Lascaux. - El restaurante del hotel era increíble con una cocina estupenda.

Fabuloso castillo restaurado con gusto exquisito, elegancia, y calidez. Habitación amplia con una fantástica cama. Baño de diseño precioso con ducha de techo gigante redonda. Restaurante de alta cocina, excelente relación calidad/precio. Personal amable y atento. Muy recomendable.

Nada que disguste.

fabuloso castillo restaurado con un gusto exquisito. elegancia, delicadeza y calidez. habitación amplia y con una fantástica cama. precioso baño de diseño con una ducha de techo gigante redonda. un restaurante de alta cocina para gourmets. relación calidad / precio estupenda. el personal es amable, se preocupa de tu bienestar. muy recomendable.

falta una silla en la habitación.

Nos alojamos en un hotel muy céntrico, cerca del centro histórico, lo cual fue muy conveniente para explorar la ciudad. La habitación era amplia y cómoda, con una cama fantástica. El baño estaba elegantemente diseñado, con una ducha de techo enorme. El personal era amable y servicial, asegurándose de que nuestra estancia fuera agradable. Disfrutamos de un delicioso desayuno en el restaurante y también había un bar con música en vivo.